top of page
Search

Liderazgo Empresarial, medir para mejorar – NO – para castigar

  • Edwin Peguero
  • Apr 1
  • 2 min read

Updated: Apr 6

A través de los años nos hemos dedicado a edificar un mundo en el que cada día el valor del ser humano, en lugar de apreciarse, ha ido cayendo y lo que es peor, cada vez con mayor rapidez.


ree

Nos hemos acostumbrado, sin darnos cuenta, a valorar más los resultados económicos que el bienestar de las personas con las que laboramos. Estamos más pendientes de encontrar al culpable de los errores que de las razones que motivaron sus ocurrencias.

En otras palabras “creamos indicadores con el principal propósito de castigar – NO – de realmente mejorar. Debemos buscar soluciones junto a nuestro equipo de trabajo, ya que esto nos ofrecería una maravillosa oportunidad para recibir una nutrida variedad de ideas, que podrían ser utilizadas para la capacitación y creación de instructivos estándares, que puedan guiar a los nuevos integrantes, que por rotación natural se van sumando a la estructura de la empresa.

Soy consciente de que no les estoy ofreciendo nada nuevo, sino que únicamente les estoy recordando valiosas recomendaciones que de seguro han recibido en el pasado repetidas veces y de diferentes fuentes, pero a las que han hecho caso omiso, por buscar la manera más rápida y aparentemente más conveniente, o porque simplemente las han olvidado poner en práctica y aprovechar así sus maravillosos aportes.

Se ha demostrado de diversas maneras que cuando trabajamos juntos y nos enfocamos en un mismo objetivo, todo fluye mejor y los resultados, además de conseguirse, son mucho más duraderos.

Les exhorto a aprovechar la diversidad con la que cuentan en sus equipos de trabajo, procurando siempre el bien común y la construcción de un ambiente que promueva la creatividad y colaboración.


🌿 Reflexión final

No nacimos para vivir de manera individual, aislados. Nacimos para vivir en comunidad, para apoyarnos y ayudarnos unos a otros, valiéndonos de los dones recibidos, aprovechando el poder del complemento que estos dones nos ofrecen.

Mantengamos presente el mensaje que el mismo Jesús nos dejó en Lucas 6:36-38:

“Sed compasivos como vuestro Padre es compasivo. No juzguéis y no seréis juzgados, no condenéis y no seréis condenados; perdonad y seréis perdonados. Dad y se os dará; una medida buena, apretada, remecida, rebosante pondrá en el halda de vuestros vestidos. Porque con la medida con que midáis se os medirá.”

 
 
 

Comments


bottom of page